Las barbacoas de hierro son quizá las más demandadas en el mercado español. Son muchos los hogares con jardín o terraza que utilizan este tipo de barbacoa para cocinar en los eventos, sean éstos de la índole que sean. En los últimos años también están tomando fuerza en el mercado las barbacoas de acero inoxidable. Como sucede en casi todos los productos, cada cual tiene sus pros y sus contras y no todas las de hierro o todas las de acero tienen las mismas características ni calidades. No es lo mismo un artículo que tenga una base de hierro de un centímetro que la que la tenga de dos centímetros y tampoco lo es si la estructura es de acero pesado con tratamiento pulverizado, como sucede con la Char-Griller, o de finas planchas de hierro como puede suceder en la típica de trípode de bajo coste que pierde su facultad de cocina en tres o cuatro usos.
Generalizando podemos decir que las barbacoas de acero son, por lo general, más duraderas. Son más resistentes a la humedad, especialmente si tienen algún tratamiento externo pensado para ello, y tienen una mayor resistencia al calor, pudiendo en algunos casos y siempre que la marca así lo indique, realizar el fuego con leña.
Las barbacoas de hierro suelen ser de un precio menor. Al igual que sucede con la mayoría de productos, también existen diferencias en cuanto a las calidades del hierro. El grosor de éste, o si tiene un tratamiento externo de algún tipo, influyen de forma definitiva en su durabilidad y su capacidad de resistencia al calor. En Mundobarbacoa buscamos siempre productos con buena relación calidad precio teniendo en cuenta éstos y otros aspectos. Imex el Zorro, fabricante español, es un ejemplo de las barbacoas de hierro que hemos elegido, mientras que las citadas Char-Griller, de procedencia americana, son de acero pesado con gran resistencia al calor y a buen precio teniendo en cuenta su calidad.
Independientemente de la estructura, ya sea en hierro o acero, en mundobarbacoa.com recomendamos la utilización de parrillas de acero inoxidable o el uso de algún material no poroso para el cocinado. La razón no es otra que de salud. Según varios estudios, el hierro sin tratar, al ser más poroso que otros materiales, incorpora en cada cocinado pequeños restos de grasa o de alimentos que se requeman al hacer otra barbacoa posterior, soltando muchas toxinas que no son recomendables para su consumo.